jueves, 17 de noviembre de 2011

Última reunión del año

El lunes 14 de Noviembre tuvimos nuestra última reunión del año.
Ya a esta altura del año los chicos están cansados y con todas sus energías y tiempo puestos para los exámenes. Por esta razón sólo hicimos una reunión informal.
Cuando llegamos las chicas estaban preparando unas empanadas para compartir. Acá Laura las muestra con mucho orgullo.
Laura esperaba a los mellis con un regalo muy especial: ¡burbujeros!!!
Nosotros habíamos traído algunas cositas para compartir una picadita con los chicos y disfrutar de una charla amena.
Berenise cenó (eso fue algo muy especial).
Dani y Laura brindaron con jugo de naranja...
y Walter se dedicó a las empanadas aunque estaban medio morochas.
Claudia llegó algo más tarde porque rendía un examen. Pero al menos llegó para compartir un rato con nosotros y relajarse un poco.

No podemos terminar el año sin presentarles el "hijito" o "mascota" de Laura. El pobre sólo crece para arriba... habrá que ver hasta dónde llega sin quebrarse...
Este videíto nos muestra lo acendosas que son las chicas.
¡Muchas gracias a los chicos y chicas que compartieron el año con nosotros! Esperamos que el 2012 venga algo más tranquilo. El Hogar es una bendición de Dios para quienes pueden disfrutar del espacio, tanto como moradores como quienes los y las acompañamos.
Que tengan un buen descanso cuando comiencen sus vacaciones. ¡Hasta el año que viene!

Estela y Walter

martes, 8 de noviembre de 2011

Culto en el Hogar de Estudiantes

El domingo 11 de Noviembre, a las 17 hs., celebramos un culto con las chicas del Hogar. El tema fue la Espiritualidad. Primero hablamos acerca de lo que entendemos por Espiritualidad y de qué manera nos sirve para enfrentar los diferentes problemas que se nos presentan en la vida.
A través del relato de Lucas 15:11 ss, pudimos reconocer la Misericordia de Dios, su capacidad de perdón y aceptación. Esto mismo nos hizo reflexionar acerca de nuestras vidas y nuestra relación con los demás.
Después, a través del Salmo 121 tuvimos un momento de oración.
Entonces la pastora Estela, a través de un relato, de una música y algunas indicaciones, llamó a las jóvenes a relajarse para encontrarse consigo mismas.
Tanto fue la relajación del pequeño Benjamín, que quedó dormido... las chicas casi, casi que también.
Después cantamos y celebramos la Santa Cena. Oramos y finalizamos con una antigua bendición irlandesa y el abrazo de la paz.
¡Gracias, chicas, por aceptar esta oportunidad de reflexionar y adquirir nuevos recursos para una vida más integral! Lamentamos mucho la ausencia de padres y personas de la comunidad de Bahía Blanca. Es una pena que no hayan sentido que este espacio también es de ellos.
Tal vez el año que viene aprovechen esta oportunidad de comunión.
¡Que Dios los y las bendiga!

Estela y Walter