martes, 8 de diciembre de 2009

Anécdotas del piadoso 2009

Paula, después de un año de acompañar a los chicos, nos hizo una evaluación del año en el Hogar:
"El gordo Hogar de Estudiantes este año tuvo el agrado de recibir a los ocho obsenos chicos que a decir verdad, eran muy distraídos. Podemos comenzar presentando al tarambano Alan, que hace unos días fue elegido para ser promotor de almohada, por tener un profundo dormir. Este hermoso chico es un verdadero fiaca, que tiene enamoradas a todas las dormilonas chicas del Hogar.
Continuamos con la presentación de la haragana Claudia, quien dice estudiar todo el día para llegar a ser una alcohólica contadora, ella viene de la mentirosa ciudad de Villalonga.
Es el momento de hablar de la trabajadora Caro, quien fue la piropeadora y cocinera de todos los infieles chicos de la casa, ella fue la encargada de alimentar sus feas panzas.
Pasaremos ahora a hablar del buen Andrés, el tresarroyense que se pone máscaras y asusta a las bellas chicas... El mismo que entiende mal el juego y dice "flash".
Conocerán ahora a la enferma Eli, quien siempre fue motivo de risas para todos, ella es la que habla dormida, la que tiene plantitas, la más bigotuda del grupo.
A mediados de año entraron dos jóvenes pata de lana que para hacer sencilla la cuestión se llaman Paola, y vienen de la panzona ciudad de San Martín.
Una de ellas, cuentan las malas lenguas, anda poniendo harina en las puertas para atrapar a las largas lauchas; la otra que es más corta parece algo tímida, pero en el "dígalo con mímica" nos dejó a todos boquiabiertos representando a los programas.
Y por último les contaremos sobre la ancha Berenice, que estudia para intoxicarnos a todos con químicos... ¡ah no!... era ingeniería química.
Es hora de hablar de las creídas personas que acompañaron el Hogar durante este audaz año. ¿Qué podemos decir del "don Juan" Walter? que se ocupó de visitar a los chicos, arreglar la luz que cortó Eli, y traerles agua, porque hasta eso rompieron los feroces chicos.
Después tenemos a la inquieta Estela y sus dos turbios mellizos, ella siempre tuvo rato para sentarse a charlar, reflexionar y divertirnos.
La rompepelotas Paula trajo sus falsos juegos y se rió se sus pavadas.
Los haraganes padre también estuvieron presentes colaborando en todo lo que necesitamos.
Por eso es momento de decir gracias a todas las educadas personas que hicieron y hacen de este despilfarrador Hogar un lugar para todos y todas."

Esta historia la escribió Paula, pero los adjetivos calificativos los pusimos entre todos los que estábamos en la reunión: ¡y este fue el resultado!!!
Y aquí está la culpable... comiendo... como lo ha hecho durante tooooodo su año de observación, en donde nos rompió los cocos y se comió todo lo que se le cruzó por delante: a todos les digo ¡cuidado con Paula, no le den la mano que te agarra el codo!!!
¡Gracias, Paula! Sabés que todo esto va "con onda". Gracias a todos los que se prestaron a pasarla bien y reírse un poco de sí mismos también.

Estela

Celebración de fin de año

El domingo 6 de Diciembre, a las 10 hs., celebramos un culto de finalización de año en el Hogar junto a los estudiantes y la comunidad de Bahía Blanca.
Walter acompañó los cantos con su acordeón, lo que animó la celebración.
Durante el culto reflexionamos acerca del perdón de los pecados y el arrepentimiento en la búsqueda de una nueva forma de vivir nuestras vidas. Asumimos nuestras debilidades y de cuánto necesitamos la ayuda de Dios para transitar en el camino de la vida. Asumimos también que somos reincidentes pero al mismo tiempo, Dios es misericordioso y comprensivo.
Es tiempo de Adviento, tiempo de reflexión y replanteos, pero también un tiempo en donde esperamos expectantes la llegada del Niño Jesús.
Después de un año tan difícil, en donde algunos de los jóvenes por primera vez permanecieron un año entero lejos de sus hogares, en donde pasaron tantas dificultades, fue bueno recordar a nuestro Dios misericordioso que siempre está a nuestro lado.
Después de la celebración compartimos un almuerzo comunitario.
Para los chicos fue una experiencia diferente. Algunos de ellos estaban bastante asustados al principio...
... pero compartir y celebrar juntos, finalmente une y provoca comunión. ¡Al final éramos una gran familia!
Como no podía ser de otra manera, aparecieron los juegos. Esta vez: ¡a apagar la vela! Ganadora: Claudia... pero Alan, Eli y Paola hicieron su esfuerzo... ¡cuidado al agacharse, no vaya a ser que pase algo inesperado!
Muchas gracias a todos y todas que se hicicieron eco, ¡que Dios los y las bendiga!
Estela Andersen